Damas y caballeros, es un placer para sus servidores, los viejones delinares de Edwin Sandoval, brindar este homenaje en honor a ellas.
Ya te olvidé, vuelvo a ser libre otra vez.
Vuelvo a volar hacia mi vida que es tan lejos y prohibida para ti.
Ya te olvidé, vuelvo a ser libre otra vez.
Vuelvo a volar hacia mi vida que es tan lejos y prohibida para ti.
Ya te olvidé, ya estás muy lejos de mí.
Tú lo lograste con herirme en lastimarme.
Y convertirme en no sé qué.
Me atrapaste, me tuviste entre tus manos.
Me enseñaste lo inhumano y lo infeliz que puedes ser.
Te fingiste exactamente enamorada.
Aunque nunca me has amado, yo lo sé.
Me dijiste que jamás podría olvidarte.
Que después iré a rogarte y a pedirte bésame.
Yo luché contra el amor que te tenía y se fue.
Y ahora ya te olvidé.
Luché contra las propias fuerzas de mi corazón.
Y al fin te olvidé.
Y lo puedo decir, ya te olvidé
Ya te olvidé, ya estás muy lejos de mí
Tú lo lograste con herirme, lastimarme
Convertirme en no sé qué
Me atrapaste, me tuviste entre tus manos
Me enseñaste lo inhumano y lo infeliz que puede ser
Te viquiste exactamente enamorada
Aunque nunca me has amado, yo lo sé
Me dijiste que jamás podría olvidarte
Que después iría a rogarte y a pedirte bésame
Yo luché contra el amor que te tenía y se fue
Y ahora ya te olvidé
Y ahora ya te olvidé
Y ahora ya te olvidé
Y ahora ya te olvidé
Đang Cập Nhật
Đang Cập Nhật
Đang Cập Nhật