Hermanito,
cántate el temita ese del barrio bueno.
¿El de las minas?
Sí, sí.
Venga, venga, vale.
Ya verás qué guay.
Para la gente de mi barrio.
Vámonos.
Mi hogar, los sueños, mi voz, silencio,
mi nombre en el recuerdo podrá hacer un mundo mejor.
Cada hoja vez el viento,
por segundos me reencuentro
con el niño que algún día,
sin quererse,
hizo mayor.
Donde están las tardes con olor a libertad.
Donde busco el sueño que quiero recuperar.
Y muchas tardes fui guerrero,
yo pragmago del balón.
Un disfraz mafia más fuerte,
que era un héroe de acción.
Todo era diferente y ahí mandaba el corazón.
Quien pudiera ser pequeño y volver a ser yo.
Margarena,
mi espada de madera,
ser pirata fue con malo.
Y por barco la imaginación y guerras con tregua.
Mi guitarra siempre apuesta por escenario un banco.
Viví las minas desde el corazón con olor a libertad.
Donde busco el tiempo que quiero recuperar.
Y muchas tardes fui guerrero,
yo pragmago del balón.
Un disfraz mafia más fuerte y era un héroe de acción.
Todo era diferente y ahí mandaba el corazón.
Quien pudiera ser pequeño y volver a ser yo.
Margo del balón,
un disfraz mafia más fuerte y era un héroe de acción.
Todo era diferente y ahí mandaba el corazón.
Quien pudiera ser pequeño.
Donde están las tardes con olor a libertad.
Donde busco el sueño que quiero recuperar.
Y muchas tardes fui guerrero,
trasmago del balón.
Un disfraz mafia más fuerte y era un héroe de acción.
Todo era diferente y ahí mandaba el corazón.
Quien pudiera ser pequeño y volver a ser yo.
Y volver a ser yo.
Y volver a ser yo.