Mira.
RKM.
95.
Llegaré a la cumbre del Valhalla.
Más solo que la una, a las dos me encerré,
a la tercera bala vencida,
a hueso pensaba ayer, cuatro veces me caí,
y otras cinco me levanté,
otra noche que me vuelvo borracho a las seis,
me quemé dentro de tu fuego,
no sé qué esperaba,
ahora me quemo en los pulmones dando otra calada,
ahogadas las penas al fondo de esas
jarras como cupones,
se acumulan estas taras,
y yo qué sé,
no sé qué hacer desde que
la besé,
tantas veces lo pensé que esto me iba a doler,
me cansé de verme en el
espejo,
ya me cansé,
no puedo contener las ganas de volverte a ver,
no hay tiritas para
este corazón partido,
la sangre ya no fluye al compás de mis latidos,
mi locura es
esta colgando de un hilo porque no encuentro
la cura para este cuerpo malherido,
estoy
cansado de sentir de la forma que siento,
descargante alta intensidad directas al cerebro,
pinchazos en el corazón que dejan sin aliento,
llorando tanto que mi cuarto se inundo entero,
orgulloso de lo que soy,
cansado de lo que he sido,
feliz por lo que vino y triste por
lo que se ha ido,
arrepentido por no haber cogido mi destino,
pero siguiendo mi camino
para no estar perdido.
Llegaré a la cumbre del Valhalla,
aunque esté solo y apagado
como aquella chusta,
ya no quiero que me cuenten más cuentos de hadas,
ya esperé demasiado,
espero que te cunda,
llegaré a la cumbre del Valhalla,
aunque esté solo y apagado
como aquella chusta,
ya no quiero que me cuenten más cuentos de hadas,
ya esperé demasiado,
espero que te cunda.
Tengo tantas ganas de roer que ya estoy canino,
me duele tanto querer y no ser querido,
tantos arañazos que salen mis instintos felinos,
saco las garras y me destripo los intestinos,
ni corriendo una maratón estoy tan cansado
de correr de todo mi fantasma de aquel pasado,
tantas heridas que ahora estoy jugando al ahorcado,
intentando encontrar las letras que me han marcado,
si soy la estrella estrellada dentro
del condado,
voy a encerrar mis sentimientos tras un candado,
nunca vuelva frío a un cola
apasionado,
no tientes a la suerte,
no tires esos dados,
si por mí fuera dejaría todo
esto de lado,
pero no pidas a un pájaro que deje su canto,
que pegar gritos a una base
no es para tanto,
le corto la lengua al que se meta con lo que hago,
algunos tienen sueños,
los míos sueños frustrados,
ya no me reconozco,
porque tan cambiado,
tanta negatividad que
el ambiente está cargado,
pero la corto poco a poco con mis propias manos,
con mis propias
manos,
RKM 95,
con mis propias manos,
llegaré a la cumbre de lo aljalao,
aunque esté solo
y apagado como aquella chusta,
ya no quiero que me cuente más cuentos de hadas,
ya esperé
demasiado, espero que te cuenta.