Voy a contarles la historia del rancho Las Amapolas
Murió Juan José Rodríguez dejando tres viudas solas
No salgas hijo de mi alma porque te van a matar
Tres hermanos ofendidos no te pueden perdonar
Madre no les tengo miedo porque también sé pelear
Al único que le temo, adiós
Dios que me ha de juzgar
No tuvo tiempo siquiera de disparar su pistola
Sintiendo tres balas juntas como si fuera una sola
Cayó con la cara al cielo con tres balas en la frente
Llegaron un lastre llorando para asombro de la gente
Las tres en el mismo tiempo gritaban yo soy su esposa
Una llegó del rosario, otra llegó del cielo
Las otras de Santa Rosa
Qué triste se ven las torres del rancho Las Amapolas
Ya le cambiaron de nombre, se llama tres viudas solas
Cuatro valientes se han ido
De la ciudad de Santa Rosa
Un muerto y tres al presidio
Adiós famosas pistolas