Me prometiste
una dulce casita de ladrillo firme.
Y cada día alimentabas conmigo la fe que se me partía.
Me puse en tus manos,
esas manos tan crueles que ahora
añoro tanto.
Y aún vienes reclamando tu trozo de pastel,
si te lo di todo.
Si te lo di todo,
¿qué más quieres?
Haber creído que desvelaba el misterio que te protege.
¿Qué se siente?
¿Qué se siente?
¿Qué se siente?
Siendo tú.
Me prometiste
abrigarme cada noche, abrazarme la pena.
Y ahora busco a tientas
un justo juez que dictamine
justa sentencia.
Que guardabas a aquella pobre
chica en tu pecera
y aún gira entre esas pasas insatisfechas.
¿Qué se siente?
¿Qué se siente?
¿Qué
02:35