Es posible que la vida me dé otra oportunidad
y los fantasmas del pasado no regresen.
¿Quién sabe dónde iremos a parar?
¿Y si no estás da igual?
¿Y si te pierdes mejor?
¿Por qué es tan sedecido que voy a dejar de hablar?
Que no se pierdan las verdades de mi rumbo.
Los miedos duelen en la oscuridad.
Duelen en la oscuridad.
Y si el alma es de cristal,
la dejaré donde está aquí en mí.
La vida está llena de frisas.
Y me he parado a pensar aquí en lo eterno de un segundo.
Que hoy siento mi risa.
Aceptada y decidida.
Con color lleno de vida.
No, no, no, no voy a cambiar más.
Seré mi prioridad.
No hay vida sin vivir.
Llegó mi turno.
No voy a charandar.
Si no sé dónde voy,
prefiero ir hacia atrás.
Hoy voy a ser cabal.
Es posible que la vida me dé otra oportunidad
y el equilibrio de mi mundo quede quieto.
Quizás es tiempo de reflexionar.
Y lo que pasó, pasó.
Y lo que venga, vendrá.
Sin más,
mientras tanto seguiré cantando para que
mi voz deje su huella en el transcurso
del recuerdo de todo aquel que me quiera escuchar.
Nos uniremos en el mar donde navega la paz.
Yo estaré allí.
La vida está llena de frisas.
Y me he parado a pensar aquí en lo eterno de un segundo.
Que hoy siento mi risa.
Aceptada y decidida.
Con color lleno de vida.
No, no, no, no voy a cambiar más.
Seré mi prioridad.
No hay vida sin vivir.
Llegó mi turno.
No voy a charandar.
Si no sé dónde voy,
prefiero ir hacia atrás.
Hoy voy a ser cabal.
Hoy voy a ser cabal.