Al despuntar por Anaga, el sol guanche cada día,
a Santa Cruz lo despierta, mientras dora la bahía,
guiñendo cumbres y valles, y besando a las palmeras,
bajando de los trigales, a enredarse en las tuneras.
Oh, manantial de color, por los campos en flor,
por el oro y la miel, por la novia del sol.
Y cuando muere la tarde, el sol por querernos tanto,
al mar y al cielo les pide, para el viejo teide un manto,
hecho con besos de olas, con rumores de trigales,
con murmullos de una fuente y cadencias de cantar.
Música
Puso a Dios su mano un día,
Música
Sobre la tierra canaria,
Música
Puso a Dios su mano un día,
Música
Y al tocar la lava fría,
Música
Ay, Virgen de Candelaria,
Música
En rosas las convertiría,
Música
Y por los senderos son las margaritas,
Música
Lluvia de estrellitas de dulce candor,
Música
Rosario de plata sobre el verde suelo,
Música
Que le van al cielo nuestro corazón.
Música
Y cuando muere la tarde, el sol por querernos tanto,
Música
Al mar y al cielo les pide, para el viejo teide un manto,
Música
Teide un manto.
Música