Esta noche tengo ganas de buscarla,
de borrar lo que ha pasado y perdonarla.
Ya no me importa el que dina,
ni de las cosas que hablará, total,
la gente siempre habrá.
Yo no pienso más que en ella toda hora,
es terrible esta pasión devoradora.
Y ella siempre sin saber,
sin siquiera sospechar,
mi deseo de volver.
Que me has dado vida,
mira, que ando triste noche y día.
Rondando siempre tu esquina,
mirando siempre tu casa.
Y esta pasión que lastima,
y este dolor que no pasa,
hasta cuando iré sufriendo el tormento de tu amor.