Qué difícil es
conquistarnos con miradas igual que ayer,
uniendo en cada intenso el alma y la piel,
sabiendo que el pasado no puede volver.
Somos un libro ya leído, ven,
porque si te atreves a quitarme la sed,
yo te daré
pasión a mano llena sin pedir.
Es una eterna primavera para ti,
ven, déjate querer
y te daré el cielo y las estrellas a la vez.
Ven,
déjate querer,
qué difícil es
conquistar un sueño que tiene por dueño a otra mujer
que sabe ver o callar resignándose a
estar en la distancia dejándote hacer,
moviendo
los hilos y esperando fiel
para que demuestre si eres un hombre ver.
Yo te daré pasión a mano llena sin pedir,
seré una eterna primavera para ti,
ven, déjate
yo te daré pasión a mano llena sin pedir,
seré una eterna primavera para ti,