Ando que ando el camino
siguiendo la estela del río a la mar.
Mi alma viajera está inquieta detrás del recodo,
no sé qué vendrá.
Ayer perdí a mi amigo
por esta senda.
Hoy decidí
librarlo de mi tristeza.
Voy paseando el otoño,
me arropa la luna,
me despierta el sol.
Tengo el aliento de un sueño,
el hambre de risas y sed de emoción.
Con mi mochila voy y lo importante,
ando de prisa porque ya cae la tarde.
Voy paseando el otoño,
escucho las hojas romperse a mis pies.
Llevo la calma en mis labios,
hoy digo te quiero,
mañana tal vez.
Ayer me hundió el desprecio
y la mentira.
Hoy los bebí
con hielo
y unas sonrisas.
Con mi mochila voy y lo importante,
ando de prisa porque ya cae la tarde.