Era un hombre
de mi tierra,
de esta tierra sin lugar,
que tocaba su guitarra,
le gustaba
para rondear,
todos le decían, Pachito,
era un hombre bien cabal,
le gustaba que su
chata le escuchara su cantar,
y llevaba a hacer nata a las puertas de su hogar.
La última
vez que a Pachito visité fue en el panteón,
ahí estaban cuatro sirios,
ahí estaba en su cajón.
Fue buen hombre,
fue mi amigo,
fue Pachito,
es canción.
En el patio de su casa,
florecido está un clavel,
con agüita de sus ojos,
siempre lo riega Isabel.
Con agüita de sus ojos,
siempre lo riega Isabel.
Su amor fue Pachito Campo,
a él le sigue siendo fiel.
Qué bonito que hay amores y hay amigos como él.
Se llamó Francisco Campo,
al que le canta Manuel.