Voy a hacerme un buen lavado cerebralPara cambiarle de rutina a mi vidaDicen que en este mundo nada se olvidaOtra vida nueva voy a comenzarOlvidemos el calor de aquellos brazosQue con ansias estrecharon nuestros pechosNo me quejo haber perdido aquel derechoPorque más tarde más grande era el fracaso¡Gózalo Romero!¡Ay, ay, ay! ¡Chomper!¡Qué rico Rosarito!Seguiré rogando que tú seas felizQue el Señor siempre ilumine tu caminoQue ese amor que te encontraste tan divinoNunca vayas a engañarlo como a míTe llevaste parte de mi corazónY mi pecho ya lo estoy recuperandoComo yo la paso cantando y tocandoEn la vida mi consuelo es mi canción¡Hue-hue-oh! ¡Hue-hue-oh! ¡Hue-hue-oh! ¡Hue-hue-oh!¡Hue-hue-oh! ¡Hue-hue-oh! ¡Hue-hue-oh! ¡Hue-hue-oh!¡Gracias!