Las grietas largas llenas de susurros
El eco grita entre muros oscuros
Los pasos se pierden en danza sin fin
La vida respira donde todo es con fin
En luces frías se oculta el calor Rostros que pasan sin ver el color
El alma se alza en un grito interior
Buscando sentido en el ruido exterior
Súbete que nunca duerme ni calla
En tu pecho de hierro el alma estalla
Mil historias cruzan en un solo rincón
Eres caos y arte en constante explosión
El tiempo se curva en esquinas gastadas
Cicatrices escritas en piedras calladas
Garicias ausentes en pieles de prisa
Amores que duermen entre las cenizas
Bajo tus techos
¿qué queda de mí?
Un corazón late donde sobran sí
Pero en cada sombra encuentro mi luz Ciudad despiadada,
mi refugio y mi cruz