Vamos a correr una carrera, Doña Rosa, ¿qué le parece?Parece muy bien, moza.Ay, ¿con qué caballo piensa correr?Vamos a elegir caballo.Ay, por eso elija cualquiera de estos tres que más le guste.Agarre nomás y vaya eligiendo.¡Ah, moza!¿Para qué queremos más quino, Doña Rosa?¿Cómo juego yo?Conozco al viejo Sotrenta.Yo respeto caballeros de Estado, ni pelo ni marca.Y al del estancia las arcas le pueden bajar los cueros.A mí me asustan parejeros con tapas ni con trompetas.¡No me digas!Eres el primer Sotrenta que aquí le esquina la lata.He *** revolver las patas y también largar la jeta.¡Arriba esa croquiñola!¡Viva los rudos de mi hermana!¡Ande!Ya vamos mal, muchacha.¿Por qué, moza?Porque tiene mucho mondongo pa'l lado de la balanza.¡Esto fue un Rosillo Moro marca de Hilarión Contreras!¡Lo conozco!¡Que había ganado más carreras que el colorado Sangre Toro!¿Pero qué iba a ganar, espectacular?Montaba el mozo Toro, muy buen corredor, campero, punteador y ventajero pa' largar a la bandera.¿Y qué hay?Cuando había quien le saliera, siempre picaba primero, salía echando.¿Qué?¡Chispa por ahí el animal, moza!El rival del mocetón que se sintió desafiar, cargó pa'l peso igual al medio kilo.¿Qué va a hacer con ese cabal, Rodríguez?Lo rodeaban un montón, y hacía cuerpos azulados, y palmeaba del mar.Al ir pa'l andar y ver como se ibiesen en él, un triunfo ya descontado.¿Y pa' qué seguir narrando, doña Rosa, lo que fue aquella carrera?¿Pa' qué, moza?Si cualquier hombre de afuera ya lo estará calculando.Anduvieron maniereando el bar y errar la partida, hasta que en una salida les bajó el abanderado,y el Rosillo y el Machao fueron una luz prendida.Y se sintió, ya pegaron, y la cosa fue pareja.Ni se sacaban orejas, ni los revenques bajaron.Y cuando al final pasaron entre el público y rayero,entre aplausos y sombreros, que se agitaban de gozo,el juez gritó, sentenció, ¡puesta no más, caballero!Subtítulos realizados por la comunidad de Amara.org