Cae la lluvia en mi balcón
ocupando mi atención.
Voy descalzo y empapado,
atado de pies y manos,
hace tanto que se fue.
Y no entiendo el por qué.
Es sólo una fotografía
hecha casi trizas al doblar la esquina.
Y yo que me debato entre recuerdos,
o intentando afrontar los días que se me avecinan ya.
A toda prisa.
No me divierto ya con nada.
Las calles son medio ambular.
No encuentro nada en mi mirada.
Es sólo lluvia sin cesa.
No hay abierto ningún bar.
Y necesito conversar.
Y en vista de lo que tengo,
con mi sombra intento llegar a un acuerdo.
No me queda nada más.
Todo es pena y demás.
No me importa lo que digan.
Ya saldré de ésta.
Es sólo otra parte de yo que me debato entre recuerdos,
o intentando afrontar los días
que se me avecinan ya.
A toda prisa.
No me divierto ya con nada.
Las calles son medio
ambular.
No encuentro nada en mi mirada.
Es sólo lluvia que me debato entre recuerdos,
o intentando afrontar los días que se me avecinan ya.
A toda prisa.
No me divierto ya con nada.
Las calles son medio ambular.
No encuentro nada en mi mirada.
Es sólo lluvia...