Redonda, perfecta y desgarrada, la mancha de café.
Perfecta y desgarrada, la mancha de café.
Marrón como tus ojos que al atardecer
se vuelven verdes, transparentes y redondos,
la mancha de café.
La, la, la, la, la, la.
Marrón como tus ojos que al atardecer
se vuelven verdes, transparentes y redondos,
verdes, transparentes y redondos,
la mancha de café.