Oye, Samuel David,
el trabajo
Hermano Perezejo tiene la modalidad
Que quiere ser bendecido y no quiere trabajar
De la tele al internet día y noche se la pasa
Sueña con un carro nuevo y una bonita casa
Y se que Dios es el dueño del oro y de la plata
Por eso le está pidiendo una finquita con vaca
Y se que Dios es el dueño del oro y de la plata
Por eso le está pidiendo una finquita con vaca
Ay, Perezejo, la fe sin obra es muerta
Un día yo le dije,
hermano,
mi Dios te la puede dar
Pero qué la vas a hacer si no quieres trabajar Me dijo,
no te preocupes,
el trabajo es lo
de menos Yo sé la hipoteca, un banco y contrato,
uno sobrero Me dijo,
no te preocupes,
el trabajo es lo
de menos Yo sé la hipoteca,
un banco y contrato,
uno
sobrero
Es verdad que Dios no me dice, pero volviendo
no es la forma Porque la Biblia también dice,
el que no
trabaje que no coma Porque la Biblia también dice,
el que no
trabaje que no coma
Y Dios bendice las manos laboriosas
A trabajar, mi hermano,
a trabajar
Así como Perezejo
Viven muchos hoy en día Que no mueven una paja y quieren que
Dios los bendiga Hasta tienen resaltadas las promesas de
la Biblia Y anhelan tener de todo y tienen las manos vacías
Jesucristo llamó a Pedro,
que se encontraba pecando Y cuando llamó a Mateo,
también estaba trabajando
Jesucristo llamó a Pedro,
que se encontraba pecando Y cuando llamó a Mateo,
también estaba trabajando
Lo mismo pasó con Saulo,
en el camino a Damasco Se encontraba laburando,
cuando Dios le hizo el llamado
Ahí tiene esos tres ejemplos,
oiga mi querido hermano Las bendiciones
del cielo no son para el desocupado
Ahí tiene esos tres ejemplos,
oiga mi querido hermano Las bendiciones
del cielo no son para el desocupado
Es verdad que Dios nos bendice,
pero durmiendo no es la forma
Porque en la Biblia también dicen,
el que no trabaje que no coma
Porque en la Biblia también dicen,
el que no trabaje que no coma
El que no trabaje que no coma,
el que no trabaje que no coma
Que no trabajen, que no comen...