Buenas, buenas, los señores, permítanme su atención, hay que ver que uno hambriado
y sin tener ocupación, se pone a pensar en cosas que no tienen solución, por ejemplo,
yo una noche de esas de resignación, quise devolver el tiempo por una preocupación,
que qué sería de este pueblo si al de Buenas de Colón, no lo manda para este mundo un
despistado ciclón, para qué piensas en eso, dijo la imaginación, yo como soy más inquieto
que pulga en un camisón, nadé contra la corriente y saqué esta conclusión, ellos
dicen que trajeron para acá civilización, que el idioma, que el avance, que también
la religión, vean que soy bruto y para todo tengo la contestación, o creen que el indio
es el último soplo de la ventasón, imagínense que estamos en 1492, deleites en observando
toda esta bella extensión, esos cauces cantarinos, a lado y lado floración, la pobreza no se
ve, sólo hay riqueza montón, el cielo está despejado, miren que no hay polución, se
oye un bochinche en las chozas, están en un parrandón, las damas en bien pelotas pero
sin mala intención, danzan al son de la flauta, siguen de la flauta el son, que yo hubiese
sido cacique, suspiraría y diría, ay Dios, me hubiera muerto flaquito, como inyectado
con formol, fomentando con mis súbditas faenas de procreación, cualquier humano de
aquellos vivía como un ricachón, si no tenían esmeralda u oro, tenían carbón, ni tampoco
les faltaba dormía y alimentación, llegan esa punta y muérganos fomentando destrucción,
yo si no les agradezco su alabada aparición, los ilustres visitantes habían salido de
prisión, el menos era asesino o un depravado o un ampón, su legado fue imponer sus mañas
y corrupción, despojaron al nativo de su medio y de su honor, después dicen que nos
dieron progreso, habla y hasta Dios, que cuento, aquí ya se oraba al Dios de la creación,
idioma si el hindú hablaba, se entendían a perfección, o acaso creen que eran mudos,
niño que equivocación, el progreso que trajeron fue enfermedad e infección, sífilis, cáncer,
piruela, la tisis y el sarampión, esclavitud, vasallaje, tortura y humillación, con todo esto
y hay ingenuos que arman la celebración, que porque hace cinco siglos se juntaron de chapetón,
yo si no, más bien alabo es la actitud de Simón, porque luchó y nos brindó la ansiada liberación,
alabo al Catire Paez, a Santander y a Rondón, pero harina de otro saco, yo no le hago promoción,
espero que ustedes piensen y entren en reflexión, que lo que este loco dice es con sobrada razón,
y si no le gusta al gringo, al turco o al chapetón, que deje su culequera y se aprieta el pantalón,
que soy materia disponible para cualquier hinchazón, pero defiendo lo nuestro con alma y con corazón.