Con su permiso, señores, aquí les vengo a cantar
lo que pasó en un crucero,
casi llegando a Catlán.
Se mató Lupe García,
lo deben de recordar.
Andando Lupe tomado, les dice a sus compañeros,
yo los saqué de su casa y ahorita mismo los llevo,
pero él no se imaginaba que el demonio andaba suelto.
Se subieron a su carro y se pusieron en marcha,
pero al llegar al crucero sucedió aquella desgracia,
la gente quedó asustada al ver lo que ahí pasaba.
Se escuchó un fuerte estallido y una sirena lloraba,
era la de una ambulancia que con el carro chocaba
y después de la explosión de Lupe nada quedaba.
Hay un *** muy inventado, lo deben de conocer,
sabemos cuando salimos,
menos si hemos de volver,
tengan presente, señores,
acaba de suceder.
Vuela, vuela, palomita,
vete con rumbo a Catlán,
anda y dile a Doña Antonia que su hijo descanse en paz,
pero todos sus amigos nunca lo hemos de olvidar.