Se dice que en el mundo de la mafia
Que del rancho de La Palma se vino a salir a un hombre
Que le apodaban el Barba
Arturo, era el nombre del amigo
Era amigo del amigo, pero no le dieran nunca
Porque sabía darles piso
Hermano de Carlos y el H
Y también Alfredo que se encuentra prisionero
Caballeros de respeto
En Culichi se miraba
Don Arturo y su plebada
Grande jefe, sabio el viejo
Hombre de mucha palabra
Pero reventó la riata
Y aquel pinche día allá en Cuernavaca
Con honor perdió en batalla
Y puro calibre cincuenta, viejo
Hermido y por otros admirado
Arturo, el de botas blancas
También el jefe de jefe
Licenciado era apodado
Platican, pues el lecto con las damas
Las pieles más exclusivas
Con modelos y actrices
Decían, dormían en su cama
En la calle con la madre
Por el mundo entero, negocios y acuerdos
Hasta con el gobierno, Arturo tenía un imperio
En el rancho, la herradura, grandes grupos le tocaban
Los cadetes, los cachorros y también Ramón Ayala
Pa' que no olviden al viejo, dejó mil historias y muchas hazañas
Aquel santo de la palma