el acordeón y las glosas de
Curuzuhuateá,
así te apodó tu
gente,
orgullo del litoral de
Curuzu y de Corrientes.
Gualberto y Estigarrivia,
de
alguna estrella alumbrarán esos
homenajes.
¿Sabés andar?
Porque los homenajes se hacen en vida.
Hoy te abraza mi corazón,
Rubén Rodríguez, maestro,
estarás por siempre presente mientras suene mi acordeón.
Đang Cập Nhật
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