¡Yo! ¡Shh! ¡Yu!
¡Venga, anda!
¡El Free! ¡El Free! ¡Ven aquí!
¡Venga, que lleva ahí!
¡Venga, ven! ¡Yu!
Es una historia un tanto singular de un tipo llamado Weefly
al que le vendían al Kitran diciendo que era Giffrey.
Tenía el plan perfecto y una bici,
California X2,
que le duró hasta que pasó por el Bastier.
Los niños del colegio siempre hablaron de él
como un chiquillo callado,
oculto bajo una segunda piel.
Los más mayores siempre le hincharon a tortas
poniéndole el cuello a rosca siempre que jugaba mosca.
Tranquilo,
un hombre no se hace en un día,
pero en solo un día pueden ponerte el culo como una sandía.
Weefly era pa' su mamá la alegría,
Weefly sabía que un día el mundo se la chuparía.
La hermana de Weefly no andaba en buena compañía,
pregunta en el barrio que polla no la conocía.
Contempló las primeras peleas en casa,
Weefly se evadía leyendo El Hombre Araña y La Masa.
Pero Weefly tenía un espectrum 128,
le encantaban los yarcos y los barcos de corcho.
Bajaba con los niños del bloque,
iba al campillo y allí fue pillándole el gustillo al cigarrillo.
Un nuevo amigo apareció en su vida,
juntos pillaron un gato y fueron sacando su instinto homicida.
La historia la traigo cruda y no cocida porque en
la segunda parte habrá Weefly hasta en la comida.
Weefly es como el aire,
nadie lo ve,
Weefly roba juegos de ordenador en el corte inglés.
Weefly no tiene námejón que hace que está torrea
tirado en la calle y cide al Kelly pa' dormir y comer.
Weefly es como el viento,
nadie lo ve,
Weefly juega lo duro porque pasa del ajedré.
Weefly no tiene námejón que hace que está torrea
tirado en la calle y subía al cielo pa' volver a caer.
Después de un año,
hablar de Weefly suena extraño,
su madre dice Weefly está en la calle haciendo daño.
Esta mañana había un hombre en una ventana con
un rifle diciendo a su mujer ¿Dónde está Weefly?
El tiempo nos cambia,
Weefly ahora tiene un pitbull,
vende pastillas y bebe whisky con Red Bull.
Fuma full del Estambul y tiene un baúl sin recuerdos.
Weefly llama en bici a los niños de su colegio.
Ahora para hablar de Weefly,
hazlo con cuidado porque Weefly tiene una
cuerda y puedes acabar ahorcado o apuñalado.
Nadie sabe a dónde va,
recuerdo que Weefly era un testigo de Jehová concienciado.
Pero las mariposas blancas no pasaron por su lado,
por eso de suerte nunca hablará.
Weefly te desea lo mejor en la vida,
pero recuerda Weefly que no se puede controlar.
En el barrio, por eso ¿Dónde está?
Ha escapado.
¿Dónde está?
No importa.
¿Dónde está?
Ha escapado.
¿Dónde está?
Está en tu cara mamones.
Por eso ¿Dónde está?
Ha escapado.
¿Dónde está?
No importa.
¿Dónde está?
Ha escapado.
¿Dónde está?