Y cuando te vi,
supe que no eras para mí.
Seguro tenías a alguien que no lo ibas a dejar ir.
Pero cuando te vi,
te juro que me decidí
acercarme y decirte
que cuando te desee,
sentí que toqué el cielo.
Y no me equivoqué, no, no, no, no, no, no,
porque lo haría de nuevo y de nuevo, y de nuevo.
Y cuando te desee,
sentí que toqué el cielo.
Y no me equivoqué,
no,
no,
no,
no,
no,
no,
no,
no,
no,
no,
porque lo haría de nuevo y de nuevo,
y de nuevo.
Ya, ya, ya, todo comenzó caminando en la calle,
me apretaste la mano y llegué.
Sentí ese no sé qué,
no sé qué del que tanto hablé.
No pensé que fuera a suceder.
Todo terminó en un beso y besarte fue un placer.
Solo quería conocerte y me gustaste, no sé,
porque todo el tiempo yo quiero besarte.
Quizá, tal vez, nací para amarte,
nací para amarte.
Quiero volver a besarte porque cuando te desee,
sentí que toqué el cielo.
Y no me equivoqué, no, no, no, no, no, no, no,
porque lo haría de nuevo y de nuevo, y de nuevo.