Cuando me vaya
Si tú me esperas,
guña caimí,
llegará el día que mi alma ardiente vuelva a la vida que dejó en ti.
Cuando me aleje de tu ternura,
si tú lo sientes,
guña por ar,
en una noche tibia de mayo mi pecho, el tuyo,
retornará.
Entonces sí que yo sabré que aquella
huella que quedó se hizo caricia,
se hizo flor,
porque en tu espera renació.
Entonces sí que el naranja tendrá el perfume de este amor
y nunca más su llanto irá a entristecer tu corazón.
Hoy que me alejo de mis conscientes,
te dejo el poncho de mi pasión,
que te comije,
china querida,
y que te brinde gaucho calor.
Hoy que me alejo,
le pido al cielo, lindo y altivo,
del Taragüí,
que no te olvides que aunque lejano,
mi pecho, el tuyo, retornará.
Entonces sí que yo sabré que aquella
huella que quedó se hizo caricia,
se hizo flor,
porque en tu espera renació.
Entonces sí que el naranja tendrá el perfume de este
amor y nunca más su llanto irá a entristecer tu corazón.