había mi soplo en un mundo
fuera gris, tan frío y lejano
subí montañas,
bajé hasta el dolor
encontré la luz en medio del temblor
el alma grita,
somos uno al final
la conexión nos sana,
nos hace brillar
somos olas en un mismo mar
corrientes confusas que saben llegar
cuando despiertas y sientes el sol
entiendes que nunca estuviste solo
en cada lágrima hubo un regalo lecciones de vida en rutas que halló
y aunque perdí mi equilibrio a veces
sentí mi alma más fuerte mil veces
subí
montañas hasta el cielo el coral el alma sabia me guió hasta el final
en el
espejo deja de pesar
la conexión divina
empezó a sanar