Diosito con su poder e inmensa sabiduría creó un paraje de ensueños en la gran Orinoquía
al cual llamó Casanare, hermosa tierra bravía para que viviera su gente en grata paz y armonía.
Al lado del pie de monte desplegó su geografía, extensidad de sabanas que mantienen florecías,
alimentan flora y fauna de excelsa policromía, con cauces benefactores que desde la serranía
bañan esta bella zona para siembra y ganadería. El Cravo Sur, el Cusiana, el Casanare, el Upía,
el Chire y el Guanapalo, el Pauto y el Guachiría, el Ariporo y el Charte, el Meta y el Tocaría,
caños, lagunas y esteros para aguantar la sequía, hay gente trabajadora honesta y con hidalguía.
Lanceros casanareños mostraron su valentía cuando dieron libertad a toda la patria mía,
porque sus lanzas cortaron yugos que nos oprimían. En el coleo casanare mantiene su hegemonía,
Ángel Zambrano ganando mundiales de jerarquía y muchos más coleadores que siguen la misma vía
hacen que el público llene las mangas de Algarabía con damas despampanantes que destellan simpatía.
Artistas de gran nivel pregonan sus melodías de un arraigo cultural enmarcado en poesías,
costumbres y tradiciones de identidad definida. Ari Espicón, Walter Silva, El Cholo y Aljure Rivas,
Tirso Delgado, Alfonso Niño, Gargantas Reconocías, coplas de Lorgio Rodríguez aún resuenan todavía,
Tulio Amaro y Alberto Curbelo con su garbo y picardía, Los Leal con los mojica y hartos copleros de cría,
Las Nancy Guevara y Vargas, Elda Flores, Bien Pulia, músicos y bailadores que expresan su maestría.
Aquí el criollo se reinventa con bellas artesanías, campechanas y chichorros,
perchas, marotas curtías, hambros para los caballos, actos para baquería, pintan hermosos motivos.
En las totumas paugías y en las conchas de tortuga después de la cacería,
Don Hermes Romero en esto lleva la gran bocería.
Hay que destacar también su buena gastronomía, la mamona con ayaca, tunjos y varias bebidas.
Diecinueve municipios conforman la cofradía, San Luis Trinidad, La Paz, Sabana Larga y Nunchía,
Corozal y Monterrey, Maní con su llanería, Receptor, Salina y Zácama que quedan en Tierra Fría,
Villanueva y Tauramena, Orocuén, La Lejanía, Támara, Guazul y Chámeza.
Y porque por un día fue capital de Colombia, se ganó esa lotería,
Yopal, capital mundial del llanero y su osadía.
El petróleo fortalece en parte su economía, pero el principal bastión son agro y ganadería.
El turismo en Cazanare tiene la mecha encendida, la laguna del Nimige al turista lo extasia,
Viendo su espejo de aguas con bosques de galería.
Vaya al balneario Aguacota, pégese una zambullía, Con una cazanareña que ellas son muy divertidas.
Vaya al templo de Jehová, concéntrese en la homilía, Visite ruinas de pobres, reviva historias dormidas.
En Orocuén, parques y sidares, ve a las faunas reunidas.
Granseros de Siribana y Gurama, ¡qué alegría!
Ver gran variedad de aves y escuchar su sinfonía, Hato la Aurora, aún conserva su criolla fisonomía.
Hoy Cazanare palpita por su gloria merecía, Y la Virgen de Banare cuida su soberanía.
¡Balán de Cazanareño!
Que esta tierra es bendecida por mi Dios Omnipotente y por la Virgen María.