son
tus ojos negros de negro
que se han adueñado de mi corazón.
Ellos me persiguen con saña fatal,
ellos me fascinan y me hacen temblar.
Si ojos me queman y sé que me engañan y
muero en las llamas de un fuego infernal.
He caído en las redes de tu engaño.
Tú has nacido nomás pa' mi sufrir y dos
puñales Dios te dio para mi daño.
Un par de hojasos que cifró mi porvenir.
Con tus ojos de araña capulina
te adueñaste de todo mi querer.
Pues tu mirada tiene un brillo que fascina
y aunque me muera yo te sigo a ti mujer.
He caído en las redes de tu engaño.
Tú has nacido nomás pa' mi sufrir y
dos puñales Dios te dio para mi daño.
Un par de hojasos que cifró mi porvenir.
Con tus ojos de araña capulina
te adueñaste de todo mi querer.
Pues tu mirada tiene un brillo que fascina
y aunque me muera yo te sigo a ti mujer.