Es un honor que un cantautor de otro país
quiera estar conmigo en este escenario.
Y esta noche me honra con su visita y vamos a hacer algo juntos.
Él se llama Edgar Oseransky y pido un fuerte aplauso para él.
Muchas gracias, buenas noches.
Recuerdo aquel lugar,
oscureciendo mi canción
tan oscura como las huellas que llevaba en mi interior
Recuerdo tu mirada penetrando como bala
que se esfuerza por hacer de su labor
maltratar a otro al amar.
Recuerdo aquel lugar donde el pecado y el perdón
encontraban como cruces de una misma defunción.
Recuerdo tu llegada provocando que mis
alas desistieran de su propia ambición
y me detuve en tu estación.
Recuerdo tu buscabas libertad,
recuerdo yo buscaba donde andar y delante de ti
quemar mis naves pretendía y en solo un día desarmado ya me vi.
Y me sentí como un pirata enamorado que le ha tocado sucumbir.
Amor de mayo.
Recuerdo aquel lugar donde escapábamos del sol
con Neruda en la ternura,
con Sabina y la canción.
Recuerdo que sabía que algún día correría con premura
hasta el refugio donde habitaba el silencio y el temor.
Recuerdo tu buscabas libertad,
recuerdo yo buscaba donde andar y delante de ti
quemar mis naves pretendía y en solo un día desarmado ya me vi.
Y me sentí como un pirata enamorado
que le ha tocado sucumbir.
Pero tú sigues buscando libertad y yo sigo
buscando donde anclar y delante de ti aún
mis naves quemaría pero no entenderías,
no podrías verme así.
Y me destroza el corazón verte llorando porque sé que no es por mí.
Amor de mayo.