Unos ojitos traidores
Unos ojitos traidores
La criolla nunca confiesa la magnitud de su amor
En cambio la portuguesa se entrega que es un periódico
Ay, qué raro es el antojo de nuestra criolla mujer
Aquí nos miran de reojo y allá nos quiere comer
Ay, qué raro es el antojo de nuestra criolla mujer
Aquí nos miran de reojo y allá nos quiere comer
Ay, qué raro es el antojo de nuestra criolla mujer
Por ese quillo aburrido, verde es el daño fatal
Dejo mi tierra al olvido y me voy a Portugal
Ay, qué raro es el antojo de nuestra criolla mujer
No sé qué es lo que me hace mal, no sé qué es lo que me hace mal
Ay, no sé qué dulce es veneno, guarda la mujer allá
Ay, si uno le pide un beso, enseguida se lo da
Ay, no sé qué dulce es veneno, guarda la mujer allá
Ay, si uno le pide un beso, enseguida se lo da
Ay, si uno le pide un beso, enseguida se lo da